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¿Cómo se conserva la carne sin refrigerador?

A lo largo de la historia y en todas las civilizaciones ha existido el problema de preservar los alimentos. Se ha resuelto de diferentes maneras, según los recursos disponibles. Los productos cárnicos son especialmente susceptibles a la putrefacción, por lo que queremos explicarte cómo se conserva la carne sin refrigerador. Es una información que puede serte muy útil, y ¿sabes que hay varios métodos para este propósito?

Cómo conservar la carne sin nevera

Es posible que en algún momento necesites guardar una cantidad grande de cerdo, pavo, pollo o ternera. Saber cómo almacenar carne es una información práctica que es muy importante conocer. No ignoras que la proliferación de las bacterias lleva a la putrefacción y la hace inservible para el consumo humano.

La salmuera

Es un método sencillo y tradicional, y necesitas solo agua y sal no yodada. Tiene la ventaja de que deja las carnes más jugosas en el momento de cocinarlas, ya que la sal hace que las fibras musculares absorban agua. Es especialmente útil en piezas que tienden a quedar secas, como el solomillo de cerdo o las pechugas de ave.

Lo primero que harás es pesar la carne; calcula la cantidad de agua a un litro por kilo. Luego vas a necesitar sal en una proporción de 3 % al 8 % del peso del agua. Un ejemplo es 50 gramos para un litro. Disuelve bien la sal y dispón un recipiente con espacio suficiente para sumergir totalmente la pieza.

Deberás dejarla en salmuera durante al menos 3 días si es de 5 centímetros de ancho o menos. Para trozos más gruesos, necesitarás una semana. Antes de cocer el alimento conviene lavarlo cambiando varias veces el agua para eliminar el exceso de sal.

El ahumado

Este método dota a los alimentos de un aroma muy apetecible, como el de los chorizos curados ahumados. Un paso previo es el adobo durante un día, para lo que utilizarás las especias de tu elección. Vas a necesitar un ahumador de leña, en el que colocarás madera de cerezo, roble o manzano.

Sigue las instrucciones del fabricante del equipo y asegúrate de regular la temperatura para que se mantenga entre 60 y 80 grados centígrados. Este calor suave resulta especialmente adecuado para cortes como las costillas o el lomo de ternera.

Las piezas grandes pueden tardar hasta 20 horas en el proceso. Mientras, las pequeñas como las pechugas de pavo pueden estar listas en 6 u 8 horas. En la fase final, cúbrelas con papel de aluminio para que no se sequen. Ya sabes cómo conservar carne sin nevera, pues las carnes sometidas a este proceso se mantienen inalteradas durante varios días.

El curado

Hemos dejado para el final esta técnica, muy antigua, que sirve especialmente para carnes no demasiado gruesas, como el lomo de cerdo. Vas a mezclar una cantidad equivalente a la cuarta parte del peso del alimento de sal no yodada y azúcar a partes iguales. Este último ingrediente mejora el sabor final; añade pimienta, laurel o romero, a tu elección.

Frota muy bien con la mezcla toda la superficie de la pieza y colócala en una bandeja amplia cubierta con film. Cada 12 horas es necesario eliminar el líquido que mana de la carne. Luego hay que secarla con papel de cocina y volver a frotar con una nueva mezcla, hasta completar tres días. Al final del proceso, retira la mezcla y ya estará lista para cocinar o almacenar.

Al saber cómo se conserva la carne sin refrigerador, no necesitarás electricidad para guardar durante tiempo prolongado los alimentos cárnicos. Por otra parte, estos métodos proporcionan nuevos sabores y especiales aromas a tus preparaciones culinarias. Si quieres saber más o conseguir productos cárnicos de calidad ¡Contacta con nosotros!